Estimados hermanos del
Prendimiento:
Me dirijo a vosotros
con el más complaciente deseo que os encontréis bien de salud y de que, en la
medida de lo posible, hayáis podido sobrellevar estos tiempos tan difíciles que
hemos vivido.
Como es de costumbre
y pasado este tiempo, nuestra hermandad se prepara para afrontar un nuevo curso
cofrade y lo hacemos con renovadas fuerzas e ilusiones y confiadas en el Señor y su bendita madre.
El curso que, Dios
mediante, que hemos inauguramos hoy viernes 8 de octubre, con las preces iniciales a
cargo del Rvdo. Padre Raúl, nuestro nuevo Párroco y Director Espiritual, al que
aprovecho estas líneas para darle la bienvenida, será sin duda muy distinto a
los que hemos tenido la oportunidad de vivir en los últimos años, pero no por ello menos intenso en el
constante ejercicio de evangelizar nuestra feligresía.
Las medidas de
seguridad impuestas por las Autoridades Sanitarias, nos llaman a la responsabilidad
y prudencia de cada uno de nosotros que deben marcar siempre el buen hacer de
nuestra Hermandad con los que hemos de colaborar estrechamente para que este
curso sea lo más normalizado dentro de lo que cabe, para que no se condicione
el normal desarrollo del mismo.
Así que os quiero
alimentar de nuestro sentido fraterno, debemos entenderlo, como una oportunidad
única para focalizar todo nuestro esfuerzo en crecer como hermandad y de
sentiros orgullosos de formar parte de ella.
Os animo a todos a vivir
y formar parte de la vida de Hermandad, a vivir con intensidad los cultos a
nuestros sagrados titulares.
Hermanos, no existe
mejor ocasión que la de hoy para embarcarnos en este nuevo curso que vamos a
comenzar, un curso lleno de nuevos retos que sin duda alguna nos hará seguir
creciendo en la fe hacia a nuestros sagrados titulares.
Un fuerte abrazo fraterno.
Manuel Bernal Acuña
Hermano
Mayor
